Economía 2016: mal comienzo x Eduardo Lucita - El conjunto de desregulaciones en curso implica una fenomenal transferencia de recursos a los ricos, deteriorando la capacidad adquisitiva de los sectores populares
Los datos de la economía mundial no son nada alentadores, predomina el crecimiento débil y las materias primas siguen a la baja. En este contexto la política de ajuste y de desregulación de los mercados puesta en marcha por el gobierno Macri está haciendo sentir sus efectos sociales, mucho más rápido de lo que preveían sus impulsores.
En la primera semana del año la economía global tuvo un serio golpe en China que se expandió por los circuitos financieros mundiales y cuya onda expansiva aún se hace sentir. La fuerte caída del índice bursátil volvió a encender las alarmas en los principales centros financieros. No son pocos quienes, como George Soros, advierten que el mundo está ante problemas muy serios que recuerdan a la crisis mundial del 2008.
Datos duros - Los organismos internacionales no son nada optimistas. Más aún la directora ejecutiva del FMI, Christine Lagarde, no ha vacilado en pronosticar que el crecimiento mundial en el 2016 será decepcionante, agregando que también son muy débiles las perspectivas a mediano plazo.
Cuatro datos sostienen sus afirmaciones: la suba de las tasas de interés en los EU luego de casi una década de tasas a la baja (que fortalece al dólar, debilita el flujo de fondos y encarece los costos de financiamiento para los países emergentes);
la desaceleración de la economía china, se espera para este año un crecimiento de apenas 5 por ciento (que impacta fuertemente sobre la demanda mundial);
la caída de los precios de las materias primas arrastradas por el precio del petróleo que está en su mínimo en más de una década (que desacelera el crecimiento especialmente de los países de la América latina);
la continuidad de la recesión en Brasil y Rusia y, como resultado de estas variables combinadas, el estancamiento del comercio internacional - texto completo
Los datos de la economía mundial no son nada alentadores, predomina el crecimiento débil y las materias primas siguen a la baja. En este contexto la política de ajuste y de desregulación de los mercados puesta en marcha por el gobierno Macri está haciendo sentir sus efectos sociales, mucho más rápido de lo que preveían sus impulsores.
En la primera semana del año la economía global tuvo un serio golpe en China que se expandió por los circuitos financieros mundiales y cuya onda expansiva aún se hace sentir. La fuerte caída del índice bursátil volvió a encender las alarmas en los principales centros financieros. No son pocos quienes, como George Soros, advierten que el mundo está ante problemas muy serios que recuerdan a la crisis mundial del 2008.
Datos duros - Los organismos internacionales no son nada optimistas. Más aún la directora ejecutiva del FMI, Christine Lagarde, no ha vacilado en pronosticar que el crecimiento mundial en el 2016 será decepcionante, agregando que también son muy débiles las perspectivas a mediano plazo.
Cuatro datos sostienen sus afirmaciones: la suba de las tasas de interés en los EU luego de casi una década de tasas a la baja (que fortalece al dólar, debilita el flujo de fondos y encarece los costos de financiamiento para los países emergentes);
la desaceleración de la economía china, se espera para este año un crecimiento de apenas 5 por ciento (que impacta fuertemente sobre la demanda mundial);
la caída de los precios de las materias primas arrastradas por el precio del petróleo que está en su mínimo en más de una década (que desacelera el crecimiento especialmente de los países de la América latina);
la continuidad de la recesión en Brasil y Rusia y, como resultado de estas variables combinadas, el estancamiento del comercio internacional - texto completo