La incertidumbre permea a la sociedad brasileña luego que la cámara de diputados de Brasil aceptara continuar con la solicitud de juicio político contra la mandataria Dilma Rousseff, pues ella podría ser destituida y en su caso el Vicepresidente Michel Temer, ocupará su lugar, lo cual traería múltiples decisiones que podrían afectar al grueso de la sociedad brasileña