“En este camino sin salida que enfrentamos hoy, la recreación del hombre y su mundo se nos aparece no como una elección entre otras, sino como un gesto tan impostergable como el nacimiento de la criatura cuando es llegada la hora”. Ernesto Sabato
Necesitamos afinar y afirmar nuestro pensamiento crítico para navegar en las aguas de la crisis civilizatoria.
Cinco ideas que desarrolló el escritor argentino Ernesto Sabato en su libro “La resistencia”, publicado en el año 2000, nos parecen vigentes y de gran actualidad para orientar nuestras acciones individuales y colectivas, así como la búsqueda y construcción de alternativas.
El de nuestra época es un escenario global complejo. La profundidad de la crisis del sistema capitalista -como modelo civilizatorio, y ya no solo como un modo de producción- derriba viejas certezas ideológicas labradas durante años en el sentido común de la cultura de masas, y al mismo tiempo surgen o se expresan con mayor beligerancia nuevos factores de conflicto y disputa social, política, económica y cultural, que desestabilizan la lógica de control y reproducción de la dominación de los sistemas sociales.
Aunque, es preciso reconocerlo, tales tensiones no se concretan todavía en transformaciones revolucionarias del orden hegemónico. Parafraseando a Antonio Gramsci, asistimos a la pugna entre lo nuevo que quiere nacer y lo viejo que no quiere morir, cuya resolución lleva implícito el riesgo de la restauración del orden que pretende subvertirse - texto completo
Necesitamos afinar y afirmar nuestro pensamiento crítico para navegar en las aguas de la crisis civilizatoria.
Cinco ideas que desarrolló el escritor argentino Ernesto Sabato en su libro “La resistencia”, publicado en el año 2000, nos parecen vigentes y de gran actualidad para orientar nuestras acciones individuales y colectivas, así como la búsqueda y construcción de alternativas.
El de nuestra época es un escenario global complejo. La profundidad de la crisis del sistema capitalista -como modelo civilizatorio, y ya no solo como un modo de producción- derriba viejas certezas ideológicas labradas durante años en el sentido común de la cultura de masas, y al mismo tiempo surgen o se expresan con mayor beligerancia nuevos factores de conflicto y disputa social, política, económica y cultural, que desestabilizan la lógica de control y reproducción de la dominación de los sistemas sociales.
Aunque, es preciso reconocerlo, tales tensiones no se concretan todavía en transformaciones revolucionarias del orden hegemónico. Parafraseando a Antonio Gramsci, asistimos a la pugna entre lo nuevo que quiere nacer y lo viejo que no quiere morir, cuya resolución lleva implícito el riesgo de la restauración del orden que pretende subvertirse - texto completo