lunes, 18 de noviembre de 2019

América latina - entre el fascismo y los cambios - tres

[Fragmento] - (...) Y esto se conecta con el problema  -que siempre opera como sofisma, es decir, como razonamiento aparentemente verdadero- de las formas jurídicas.

No es la política la que le plantea problemas a la institucionalidad, esto es, a las formalidades constitucionales, sino que es la institucionalidad la que le plantea sus problemas a la política, porque es  -aparentemente-  la Constitución la que le impone límites a las decisiones o a la voluntad de los actores antineoliberales.

Pero la política resuelve bien y pronto el problema diciendo que, en Bolivia, no hay golpe contra el fraude sino que hay golpe contra la nacionalización de los recursos y contra la soberanía boliviana sobre el gas y el litio.

Y hay golpe contra los alineamientos geopolíticos y geoestratégicos por los que el Estado Plurinacional había optado como actor global soberano.

No es el fraude lo que preocupa a la derecha, sino las condiciones de posibilidad que tiene, en Bolivia, la restauración de la propiedad privada sobre los recursos, es decir, la restauración de los privilegios

que Evo Morales les hizo añicos en beneficio de la economía nacional y en beneficio de un pueblo que había comenzado a abandonar para siempre la pobreza endémica. El fraude es el pretexto enunciado como causa.- tomado de elcomunista.net - Leer texto completo