martes, 16 de febrero de 2016

Venezuela - promisorio potencial de luchas del chavismo

x Reinaldo Iturriza [exministro de cultura] - A Kléber Ramírez veinticuatro años después del 4F :: Éste es un pueblo que desea luchar. Hasta las últimas consecuencias.

Habría que empezar a dejar de ver al chavismo simplemente como una parcialidad política. El chavismo es un sujeto político, que es una cosa muy distinta.

El mismo proceso de subjetivación del chavismo consistió, entre otras cosas, en exorcizar la humillación histórica de la que siempre fue víctima por parte de las elites. La médula de lo que hoy constituye el chavismo es esa parte mayoritaria de la sociedad venezolana que siempre fue invisibilizada, excluida, explotada

Veinticuatro años después de la gesta patriótica del 4F, es oportuno traer a la memoria la figura de Kléber Ramírez, poco conocida para las nuevas generaciones, aun cuando desempeñó un papel de primer orden en los inicios de la revolución bolivariana.

A mediados de noviembre de 1991, cuenta el mismo Ramírez en el prólogo de su “Historia documental del 4 de Febrero”, “en una reunión presidida por el comandante Hugo Rafael Chávez Frías con un grupo de civiles… se decidió crear una comisión redactora de los documentos fundamentales para la instalación del nuevo gobierno”. Ramírez recibió la encomienda de encabezar tal comisión.

Apenas un par de meses antes había terminado de redactar su “Programa general para el nacimiento de una nueva Venezuela”. Se trataba de un documento escrito al calor de los preparativos de la rebelión. Hacía un año que mantenía estrecho contacto con los líderes del movimiento, lo que le permitía estar al tanto de lo que estaba por acontecer. Eventualmente, imaginaba su autor, el “Programa” contribuiría a legitimar, en el plano de las ideas, y en el campo civil, la insurgencia de los militares bolivarianos - texto completo