domingo, 5 de abril de 2020

América - El coronavirus muestra el rostro verdadero de Ecuador

[Sputnik / elcomunista.net] - El coronavirus arrasa Ecuador y deja tras de sí imágenes espeluznantes de cadáveres en las calles de Guayaquil envueltos en sábanas, en los colchones donde murieron, en cajas de madera artesanales o simplemente en bolsas negras de basura, y los menos, en ataúdes, insepultos durante días, tanto en barrios populares como en zonas turísticas. 

La locura de un mal imprevisto y los antipatrias consumen tu siglo, Señor Jesucristo ruega por nosotros, los sensatos que amamos la vida y que somos mayoría -  (José María Egas, poeta ecuatoriano, 1896-1982)  

Por Vicky Peláez* - Muchos otros cadáveres permanecían en sus casas esperando ser recogidos por las autoridades. 

Según el listado que tiene la policía para acudir a los levantamientos, el 31 de marzo estaban registrados más de 550 cuerpos en la lista de espera para ser retirados de las viviendas y no se sabe cuántos cuerpos de guayaquileños seguían abandonados en las esquinas de las calles. 

El periodista ecuatoriano, Pedro X. Valverde Rivera escribió que «Guayaquil parece haberse convertido en una suerte de hija enferma, malcriada, rebelde e indisciplinada, que no acata órdenes y amenaza con contagiar al resto del país. Nada más perversamente alejado de la verdad». 

Lo que le sucedió a esta «gente madera de guerrero» se produjo debido a la saturación de los hospitales que ya no tenían la capacidad de recibir a los pacientes con síntomas claros de COVID-19, 

el colapso del sistema funerario compuesto por tres crematorios —todos privados— con precios imposibles para las clases populares y por la disposición del Gobierno central, mediante la cual, solo médicos funcionarios públicos del ECU911 podían firmar los certificados de defunción. 

Esto significa que cada día había que enviar a más de 100 médicos a emitir los certificados - Leer texto completo