x Zigor Aldama [lahaine.org] - A pesar de que Vietnam no cuenta con la capacidad tecnológica de China o de Corea del Sur, sus autoridades han sido eficaces en el rastreo de casos
En general, Asia está demostrando una capacidad muy superior a la de Europa o Estados Unidos en la gestión de la pandemia del coronavirus. Incluso Japón, un país muy criticado por haber retrasado hasta el último minuto las medidas para contener la propagación del patógeno, ha registrado únicamente 300 muertos en una población que supera ampliamente la suma de España e Italia.
Y tanto Corea del Sur como Taiwán, ejemplos a los que mira todo el mundo, se han desenvuelto con soltura asombrosa. Pero hay un Estado que ha tenido aún más éxito y que apenas se menciona: Vietnam.
El país comunista inició el proceso de vuelta a la normalidad el pasado jueves, y lo hizo en una situación privilegiada: sin haber registrado ni una sola víctima mortal por el Covid-19. A ese cero que tanto les gustaría haber visto en sus marcadores particulares a muchos otros países le acompañan los 268 contagios detectados hasta la fecha.
Eso supone que Vietnam cuenta con 3 casos por cada millón de personas, menos del 1% de los que contabiliza España. Sólo ocho personas se encuentran en estado crítico, y lleva diez días sin registrar infecciones.
Independientemente de que, como sucede en todos los países, las cifras pueden ser poco fiables, se trata de todo un logro. Sobre todo porque Vietnam fue uno de los primeros países que, debido a su estrecha relación con China, registraron casos en su territorio.
El primero se detectó el 23 de enero, el mismo día que se decretó la cuarentena de Wuhan, epicentro de la pandemia.
Los dirigentes vietnamitas llevaban tiempo sobre aviso y habían planteado ya planes de acción, por lo que, sólo una semana y 16 contagios después, las fronteras ya estaban cerradas y se habían decretado los primeros confinamientos - Leer texto completo
En general, Asia está demostrando una capacidad muy superior a la de Europa o Estados Unidos en la gestión de la pandemia del coronavirus. Incluso Japón, un país muy criticado por haber retrasado hasta el último minuto las medidas para contener la propagación del patógeno, ha registrado únicamente 300 muertos en una población que supera ampliamente la suma de España e Italia.
Y tanto Corea del Sur como Taiwán, ejemplos a los que mira todo el mundo, se han desenvuelto con soltura asombrosa. Pero hay un Estado que ha tenido aún más éxito y que apenas se menciona: Vietnam.
El país comunista inició el proceso de vuelta a la normalidad el pasado jueves, y lo hizo en una situación privilegiada: sin haber registrado ni una sola víctima mortal por el Covid-19. A ese cero que tanto les gustaría haber visto en sus marcadores particulares a muchos otros países le acompañan los 268 contagios detectados hasta la fecha.
Eso supone que Vietnam cuenta con 3 casos por cada millón de personas, menos del 1% de los que contabiliza España. Sólo ocho personas se encuentran en estado crítico, y lleva diez días sin registrar infecciones.
Independientemente de que, como sucede en todos los países, las cifras pueden ser poco fiables, se trata de todo un logro. Sobre todo porque Vietnam fue uno de los primeros países que, debido a su estrecha relación con China, registraron casos en su territorio.
El primero se detectó el 23 de enero, el mismo día que se decretó la cuarentena de Wuhan, epicentro de la pandemia.
Los dirigentes vietnamitas llevaban tiempo sobre aviso y habían planteado ya planes de acción, por lo que, sólo una semana y 16 contagios después, las fronteras ya estaban cerradas y se habían decretado los primeros confinamientos - Leer texto completo