Raúl Menchaca (XINHUA) - Cuba trata de cambiar su matriz energética y proyecta para el año 2030 que las fuentes renovables representen el 24 por ciento del total de generación, ya que en la actualidad depende de los hidrocarburos.
El vicepresidente cubano y miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC), Marino Murillo, dijo en julio ante el parlamento que el gobierno planea destinar 3.600 millones de dólares en los próximos 15 años al desarrollo de energías alternativas, una prioridad también para la inversión extranjera.
Murillo dijo que el 96 por ciento de la generación de energía en Cuba proviene del petróleo, sin embargo para 2030 el objetivo es reducir esa cifra a 76 por ciento y el resto generarlo a partir de 19 plantas de bioelectricidad conectadas a ingenios azucareros, más 13 parques eólicos e instalaciones solares.
La utilización de energías alternativas y renovables es una de las medidas del "proceso de actualización del modelo económico" de la isla, refrendada por en abril de 2012 por el VI Congreso del PCC.
En Cuba operan en la actualidad siete parques solares fotovoltaicos, ubicados en las provincias de La Habana, Villa Clara, Cienfuegos, Camagüey, Santiago de Cuba, Guantánamo y el municipio especial Isla de la Juventud.
En la capital de la isla funciona uno en el recinto ferial de Expocuba, inaugurado en noviembre último tras una donación china y que cuenta con una potencia de un megawatt y una generación promedio diaria de 4.200 kilowatts hora al día, por lo que debe producir al año alrededor de un millón 500.000 kilowatts hora.
La energía producida por el parque fotovoltaico de Expocuba representa un ahorro de 390 toneladas de combustible fósil al año, además de que deja de emitir 1.290 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
De acuerdo con el director del recinto, Pedro Abreu, del consumo total de electricidad en Expocuba de noviembre hasta julio pasado (1.776,78 Mw), el parque proporcionó 1.178,22 Mw.
De acuerdo con el principal electricista de Expocuba, Armando Sosa, la obra permite un gran ahorro, no sólo al centro, catalogado entre los 25 mayores consumidores de electricidad de la capital, sino también al país en general.
El presidente de la Sociedad Cubana para la Promoción de las Fuentes Renovables de Energías y el Respeto Ambiental (Cubasolar), Luis Bérriz, citado por la Agencia de Información Nacional, declaró que la isla puede ser una potencia en el empleo de ese tipo de energías.
En un artículo que apareció en la última edición de la revista "Energía y tú", una publicación trimestral de divulgación científica editada por Cubasolar, Bérriz calificó como imposible la concepción de programa de desarrollo sostenible, sin tener en cuenta la aplicación de fuentes renovables de energía.
"La radiación solar mantiene el equilibrio térmico, permite la vida en el planeta y está a disposición de todos los pueblos del mundo" apuntó el especialista.
Bérriz puso como ejemplo el caso del territorio cubano, que, dijo, recibe 1.800 veces más irradiación que toda la producida por el petróleo consumido por sus respectivos sectores industriales, residenciales y de servicios a la población.
El valor promedio del impacto del Sol en la isla es de 1.400 kilowatt-hora (Kw) por metro cuadrado, de acuerdo con el profesor de la Facultad de Física y del Instituto de Materiales y Reactivos de la Universidad de La Habana, Daniel Stolik Novygrod.
A raíz de la crisis energética de 2004 y 2005, el gobierno cubano priorizó el uso y desarrollo de las fuentes renovables para la producción de electricidad y el ahorro de combustibles fósiles.
El especialista de inversiones de la Empresa de Hidroenergía, Jorge del Campo, dijo que se decidió instalar el parque fotovoltaico en Expocuba por ser el recinto ferial más importante del país, con un consumo de energía bastante elevado que se cubre en cerca de un 70 por ciento.
El vicepresidente cubano y miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC), Marino Murillo, dijo en julio ante el parlamento que el gobierno planea destinar 3.600 millones de dólares en los próximos 15 años al desarrollo de energías alternativas, una prioridad también para la inversión extranjera.
Murillo dijo que el 96 por ciento de la generación de energía en Cuba proviene del petróleo, sin embargo para 2030 el objetivo es reducir esa cifra a 76 por ciento y el resto generarlo a partir de 19 plantas de bioelectricidad conectadas a ingenios azucareros, más 13 parques eólicos e instalaciones solares.
La utilización de energías alternativas y renovables es una de las medidas del "proceso de actualización del modelo económico" de la isla, refrendada por en abril de 2012 por el VI Congreso del PCC.
En Cuba operan en la actualidad siete parques solares fotovoltaicos, ubicados en las provincias de La Habana, Villa Clara, Cienfuegos, Camagüey, Santiago de Cuba, Guantánamo y el municipio especial Isla de la Juventud.
En la capital de la isla funciona uno en el recinto ferial de Expocuba, inaugurado en noviembre último tras una donación china y que cuenta con una potencia de un megawatt y una generación promedio diaria de 4.200 kilowatts hora al día, por lo que debe producir al año alrededor de un millón 500.000 kilowatts hora.
La energía producida por el parque fotovoltaico de Expocuba representa un ahorro de 390 toneladas de combustible fósil al año, además de que deja de emitir 1.290 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
De acuerdo con el director del recinto, Pedro Abreu, del consumo total de electricidad en Expocuba de noviembre hasta julio pasado (1.776,78 Mw), el parque proporcionó 1.178,22 Mw.
De acuerdo con el principal electricista de Expocuba, Armando Sosa, la obra permite un gran ahorro, no sólo al centro, catalogado entre los 25 mayores consumidores de electricidad de la capital, sino también al país en general.
El presidente de la Sociedad Cubana para la Promoción de las Fuentes Renovables de Energías y el Respeto Ambiental (Cubasolar), Luis Bérriz, citado por la Agencia de Información Nacional, declaró que la isla puede ser una potencia en el empleo de ese tipo de energías.
En un artículo que apareció en la última edición de la revista "Energía y tú", una publicación trimestral de divulgación científica editada por Cubasolar, Bérriz calificó como imposible la concepción de programa de desarrollo sostenible, sin tener en cuenta la aplicación de fuentes renovables de energía.
"La radiación solar mantiene el equilibrio térmico, permite la vida en el planeta y está a disposición de todos los pueblos del mundo" apuntó el especialista.
Bérriz puso como ejemplo el caso del territorio cubano, que, dijo, recibe 1.800 veces más irradiación que toda la producida por el petróleo consumido por sus respectivos sectores industriales, residenciales y de servicios a la población.
El valor promedio del impacto del Sol en la isla es de 1.400 kilowatt-hora (Kw) por metro cuadrado, de acuerdo con el profesor de la Facultad de Física y del Instituto de Materiales y Reactivos de la Universidad de La Habana, Daniel Stolik Novygrod.
A raíz de la crisis energética de 2004 y 2005, el gobierno cubano priorizó el uso y desarrollo de las fuentes renovables para la producción de electricidad y el ahorro de combustibles fósiles.
El especialista de inversiones de la Empresa de Hidroenergía, Jorge del Campo, dijo que se decidió instalar el parque fotovoltaico en Expocuba por ser el recinto ferial más importante del país, con un consumo de energía bastante elevado que se cubre en cerca de un 70 por ciento.