Esas dependencias están situadas en el centro de Montreal, en el 1010 St.-Antoine Ouest, lugar que es sinónimo de angustia, de miedo y de ansiedad cotidiana para centenares de personas migrantes que viven en Montreal.
Los miembros de Solidaridad Sin Fronteras exigen la implementación de un proceso de regularización para todas las personas indocumentadas que viven en Canadá, y esto de forma inmediata, inclusiva y continua.
L@s militantes denuncian también la violencia cotidiana de la ASFC, y afirman que l@s agentes y l@s emplead@s de la ASFC participan activamente en las detenciones, en la separación de las familias, en la creación de miedo y ansiedad y, en ciertos casos, en la muerte de migrantes en detención - texto completo
