por Esther María Pérez Pérez (*) Escritora, ensayista, profesora e investigadora cubana - Hay otra educación que parte del reconocimiento de los saberes de los educandos, no para quedarse en ellos, sino para ponerlos a dialogar con otros organizados y jerarquizados según los criterios académicos al uso.
Hace unos años, la directora de la secundaria básica donde estudiaba mi hijo me pidió que fuera a darles una charla a los alumnos sobre la Casa de las Américas, donde yo trabajaba entonces.
Me sorprendió el pedido, pero colegí que la escuela había programado una actividad cultural para los alumnos y aprovechaba los recursos maternos, lo cual me pareció muy bien.
Me rompí la cabeza durante varios días para ver qué podía conectar a unos muchachos de secundaria con la Casa, hasta que se me ocurrió una idea: ¡los artistas! A los adolescentes, por definición, les interesan los artistas, y la Casa trabaja con artistas. Esa sería la manera de establecer el diálogo - texto completo
Hace unos años, la directora de la secundaria básica donde estudiaba mi hijo me pidió que fuera a darles una charla a los alumnos sobre la Casa de las Américas, donde yo trabajaba entonces.
Me sorprendió el pedido, pero colegí que la escuela había programado una actividad cultural para los alumnos y aprovechaba los recursos maternos, lo cual me pareció muy bien.
Me rompí la cabeza durante varios días para ver qué podía conectar a unos muchachos de secundaria con la Casa, hasta que se me ocurrió una idea: ¡los artistas! A los adolescentes, por definición, les interesan los artistas, y la Casa trabaja con artistas. Esa sería la manera de establecer el diálogo - texto completo