[Sputnik / elcomunista.net] - El 9 de octubre de 1967, a sus 39
años, el comandante de la Revolución cubana fue fusilado en Bolivia
después de haber sido capturado por las fuerzas locales y la
inteligencia de EEUU.
La muerte del ‘guerrillero heróico’ repercutió en
todo el mundo. En su país y el resto del continente, el Che es un
recuerdo permanente de la lucha social.
Por Francisco Lucotti* - Pese a ser una de las figuras políticas del siglo XX más reconocidas y reconocibles del mundo, admirado
por sus principios y su internacionalismo antinacionalista por otros
emblemas como el líder sudafricano Nelson Mandela o el filósofo francés
Jean-Paul Sartre,
en Argentina, su tierra natal, los reconocimientos
oficiales a Ernesto Che Guevara fueron opacados probablemente
por ser el mayor símbolo de la lucha armada en América Latina, pero su
influencia sigue viva.
Nació en 1928 en la ciudad de Rosario,
provincia de Santa Fe, en el centro de Argentina, pero la mayor parte
de su vida adulta y su trascendencia política sucedieron en diferentes
países del continente, primero como viajante y aprendiz de médico rural,
luego como el principal exponente de un ideal de revolución socialista,
que continuó hasta las últimas consecuencias.
«El Che Guevara significa mucho
para nuestra generación de pibes y pibas. Sin esa inspiración no
hubiésemos pensando en empezar una organización popular, una unión en
las villas y los barrios populares por una misma causa, una misma lucha.
Representa el enojo por un sistema opresor, pero también el amor al
pueblo», dijo a Sputnik Fidel Ruiz, referente de La Poderosa,
organización social cuyo nombre está tomado del apodo de la motocicleta
Norton con la que inició su primer viaje latinoamericano el Che en 1952 - Leer texto completo