sábado, 3 de diciembre de 2016

Llegada de Fidel a Santiago de Cuba


Las cenizas de Fidel Castro ya están en esta ciudad, adonde llegaron por la Carretera Central, una vía venida a menos porque una Autopista Nacional en sus primeros tramos la sucedió en el protagonismo del tráfico.

Tras dejar atrás el emblemático poblado de El Cobre, altar de la Virgen de la Caridad, el cortejo fúnebre arribó cobijado por un cielo gris por momentos, cómplice de la tristeza de los cubanos en este sábado de siembra y despedida

A lo largo y lo ancho de la fisonomía urbana se agolpan los santiagueros para ser partícipes de esta espontánea y multitudinaria ceremonia en un recorrido que además de paradas en puntos de enorme relevancia histórica como el parque Céspedes y el cuartel Moncada, incluirá a algunos de sus barrios más humildes.

El de Chicharrones es uno de esos vecindarios donde a su modesta condición se suma una probada vocación revolucionaria y fidelista, patente por igual en otros como los de Versalles, en una de las alturas que rodean a la urbe y se aprecian modernos edificios construidos en las últimas décadas.

Las montañas de la Sierra Maestra, cinturón verde que rodea a esta capital provincial, se hicieron más presentes en el acercamiento de la caravana, en una evocación simbólica de su protagonismo como cobija de la guerra de guerrillas encabezada por el Comandante en Jefe en los últimos años de la década de 1950 - texto completo