x Marco Teruggi [Página 12] - Frustración y deseo de confrontación se
viven en la frontera, del lado colombiano, donde han quedado sicarios
que durante el domingo y ayer intentaron pasar a Venezuela
Se vive desilusión en filas opositoras.
Esperaban que el Grupo de Lima reunido ayer (lunes) en Bogotá se pronunciara a
favor de una declaración internacional contra Venezuela. La expectativa
estaba puesta en los discursos de Mike Pence, vicepresidente
norteamericano, e Iván Duque, presidente de Colombia.
La frase no
apareció, la reunión se vivió como un partido, como en la base del
puente Santander, en la frontera del lado colombiano, donde se vieron
imágenes de vecinos reunidos junto a la policía para escuchar las
intervenciones. [...]
El resultado final fue entonces una
ampliación del repertorio de acciones contra Venezuela, con más
sanciones a funcionarios del gobierno –cuatro gobernadores– llamado a
acrecentar los ataques sobre la economía, aprobar 56 millones de dólares
por parte de EEUU para apoyo/negocio, entre otros puntos.
Juan Guaidó,
quien estuvo en la reunión, mantuvo su línea actual que ya deja
planteado la opción de la intervención, aunque sin afirmarlo: “Es
momento de escalar la preocupación y considerar los niveles más altos de
presión y acción”. [...]
Esa frustración y deseo de confrontación se
vive en la frontera, del lado colombiano, donde han quedado grupos de
choque que durante el domingo y ayer intentaron pasar del lado
venezolano, es decir cruzando el casi río.
Aproximadamente cien en los
puentes Simón Bolívar y Santander, encapuchados, con logística para
comer, armar bombas molotov, amparados por la policía colombiana,
conducidos por dirigentes muchas veces colombianos. [::] tomado de lahaine.org - Texto completo