(Sputnik / elcomunista.net) - El 16 de marzo del 1945 las tropas
soviéticas lanzaron una de las ofensivas más grandes y más importantes
de la Segunda Guerra Mundial: la operación para liberar Viena. Sin ella,
su avance hacia Berlín hubiera sido imposible.
El Ejército Rojo empezó a prepararse
para penetrar en Viena tras haber liberado Budapest.
El secretario
general del Comité Central del Partido Comunista de la Unión
Soviética, Iósif Stalin, ordenó el 17 de febrero que se lanzase una
operación con el objetivo de destruir al grupo de los Ejércitos Sur de
la Alemania nazi y ocupar las zonas situadas entre Bratislava, Brno,
Viena y Nagykanizsa.
En total, la URSS contaba con 640 soldados y oficiales,
12.100 piezas de artillerilla, más de 1.300 tanques y cañones
autopropulsados y cerca de 1.000 aviones.
Mientras tanto, las fuerzas de
la Alemania nazi disponían de 410.000 soldados y oficiales, casi 700
tanques y cañones autopropulsados, 5.900 piezas de artillería y
morteros, y casi 700 aviones.
Los soldados alemanes habían
organizado tres líneas de defensa que reforzaron a medida que las tropas
soviéticas avanzaban hacia Viena. La primera línea se extendía a una
distancia de entre cinco y siete kilómetros de la orilla del río Gron,
donde había trincheras protegidas con campos de minas.
La segunda línea de defensa se
encontraba a una distancia de entre 20 y 30 kilómetros de la primera.
Los soldados alemanes construyeron varias fortificaciones cerca de los
pasos a través del río Raba y convirtieron la ciudad húngara de Gyor en
un gran nudo de resistencia, convencidos de que era inaccesible para las
tropas soviéticas.
La tercera línea de defensa se ubicaba
en la frontera húngaro-austriaca. Aquí las fuerzas de la Alemania nazi
también excavaron trincheras, levantaron obstáculos y colocaron minas en
los campos. Las ciudades colindantes fueron convertidas en fortalezas.
El 16 de marzo el Ejército Rojo pasó a
la ofensiva tras instruir a sus fuerzas, y hasta la llegada del
crepúsculo logró penetrar en la defensa de la Alemania nazi entre 3 y 7
kilómetros.
Inicialmente los soldados nazis intentaron oponer
resistencia, razón por la cual se desarrollaron feroces combates por la
ciudad húngara de Szekesfehervar. No obstante, las tropas soviéticas
consiguieron finalmente cercar al enemigo y al mediodía del 13 de
abril liberaron Viena de los fascistas- Ver texto + fotos