[Sputnik / elcomunista.net] - El candidato presidencial demócrata de EEUU, Joe Biden, está en un momento relajado de la campaña electoral y se sienta tranquilamente a observar cómo su oponente, Donald Trump, lucha por sumar votos en plena crisis sanitaria y económica a causa del covid-19, y con la cuestión racial al rojo vivo.
Por Lucía Barrios* - Mientras Biden no necesita hacer ninguna acción para captar votantes y sus apariciones públicas se han reducido en las últimas semanas, el presidente está en una carrera a contracorriente: debe, como jefe de Estado, enfrentar desafíos clave, como la pandemia y la crisis por el racismo, y al mismo tiempo no perder de vista los comicios del 3 de noviembre.
En estos meses, el mandatario se ha puesto en el foco de la polémica al negar la catástrofe mundial del covid-19, en momentos en que el país que gobierna registra más casos y muertos por la enfermedad que ninguna otra nación en el mundo.