Claudio Katz (especial para Argenpress.info) - El social-liberalismo adoptó los postulados de la Tercera Vía y motorizó las transiciones pactadas con las dictaduras, siguiendo el modelo de la Concertación chilena. FH Cardoso fue un artífice de estos procesos
Comenzó en el progresismo y concluyó como abanderado del ajuste. Transparentó su visión del desarrollo como un proceso de asociación con el capital extranjero y eliminó todos los resabios de la Teoría de Dependencia
Castañeda abandonó la izquierda para sumarse a un gobierno derechista, convalidando el orden capitalista y cuestionando la rebeldía popular. Sustituyó caracterizaciones dogmáticas de la plusvalía por elogios a la uniformidad globalista. Transformó su crítica al economicismo en una idealización de la política y convirtió su tesis de múltiples imperialismos en aprobaciones del status quo
También Sebreli reemplazó su defensa inicial de un socialismo puro por adscripciones al neoliberalismo. Sus viejos cuestionamientos a la subsistencia de brechas entre el centro y la periferia devinieron en una aceptación de la globalización. Enalteció el desarrollo de las fuerzas productivas estableciendo una falsa identificación del progreso con el capitalismo. Desconoció que el motor la historia es la búsqueda de la emancipación social, a partir de legados de resistencia aportados por todos los sectores oprimidos
El social-liberalismo repite los mitos del eurocentrismo. Avala la destrucción de las civilizaciones pre-capitalistas, desvaloriza las culturas autóctonas y justifica la expansión colonial. Ha incorporado las simplificaciones de la teoría neoclásica, relativiza las desigualdades internacionales e imagina que los países atrasados reproducirán el desarrollo de los avanzados
El neoliberalismo de los años 80-90 sumó a varios mandatarios de la denominada Tercera Vía como Tony Blair o Felipe González. Provenían del keynesianismo de posguerra y del reformismo socialdemócrata, pero asumieron el discurso conformista que proclamó el ocaso de la ideología, la extinción de la era industrial y la obsolescencia de la lucha de clases
Castañeda abandonó la izquierda para sumarse a un gobierno derechista, convalidando el orden capitalista y cuestionando la rebeldía popular. Sustituyó caracterizaciones dogmáticas de la plusvalía por elogios a la uniformidad globalista. Transformó su crítica al economicismo en una idealización de la política y convirtió su tesis de múltiples imperialismos en aprobaciones del status quo
También Sebreli reemplazó su defensa inicial de un socialismo puro por adscripciones al neoliberalismo. Sus viejos cuestionamientos a la subsistencia de brechas entre el centro y la periferia devinieron en una aceptación de la globalización. Enalteció el desarrollo de las fuerzas productivas estableciendo una falsa identificación del progreso con el capitalismo. Desconoció que el motor la historia es la búsqueda de la emancipación social, a partir de legados de resistencia aportados por todos los sectores oprimidos
El social-liberalismo repite los mitos del eurocentrismo. Avala la destrucción de las civilizaciones pre-capitalistas, desvaloriza las culturas autóctonas y justifica la expansión colonial. Ha incorporado las simplificaciones de la teoría neoclásica, relativiza las desigualdades internacionales e imagina que los países atrasados reproducirán el desarrollo de los avanzados
El neoliberalismo de los años 80-90 sumó a varios mandatarios de la denominada Tercera Vía como Tony Blair o Felipe González. Provenían del keynesianismo de posguerra y del reformismo socialdemócrata, pero asumieron el discurso conformista que proclamó el ocaso de la ideología, la extinción de la era industrial y la obsolescencia de la lucha de clases
Postularon una mirada socio-liberal y repitieron los mensajes privatistas, silenciando los monumentales desequilibrios creados por la desregulación de la economía - mucho màs en Argenpress