La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó contar con fuerzas suficientes para enfrentar las emboscadas que desde su reelección en 2014 le tienden quienes intentan paralizar el gobierno y buscan arrebatarle su mandato de forma golpista.
“Extendemos las manos a todos cuantos quieran lo mejor para Brasil y estén dispuestos al diálogo y la concertación”, subrayó la mandataria antes de enfatizar que “la gritería de los golpistas no va a apartarnos del rumbo”.
Roussef pronunció un discurso en el Palacio de Planalto durante la ceremonia de toma de posesión de nuevos ministros, entre ellos el ex dignatario, Luiz Inácio Lula da Silva, a quien definió como un gran líder político, compañero de lucha y de conquistas y un gran amigo.
“Las actuales circunstancias me dan la magnífica oportunidad de traer al gobierno al mayor líder político de este país”, dijo y enfatizó que el hecho de aceptar la jefatura de la Casa Civil demuestra la grandeza y humildad de Lula y desmiente a quienes desde hace cinco años “especulan y apuestan por una separación entre nosotros”.
La jefa de Estado subrayó: “siempre estuvimos del mismo lado y compartimos un proyecto extremadamente generoso para Brasil, para beneficiar a quienes siempre fueron excluidos. Por ellos estamos trabajando juntos otra vez” - texto completo
“Extendemos las manos a todos cuantos quieran lo mejor para Brasil y estén dispuestos al diálogo y la concertación”, subrayó la mandataria antes de enfatizar que “la gritería de los golpistas no va a apartarnos del rumbo”.
Roussef pronunció un discurso en el Palacio de Planalto durante la ceremonia de toma de posesión de nuevos ministros, entre ellos el ex dignatario, Luiz Inácio Lula da Silva, a quien definió como un gran líder político, compañero de lucha y de conquistas y un gran amigo.
“Las actuales circunstancias me dan la magnífica oportunidad de traer al gobierno al mayor líder político de este país”, dijo y enfatizó que el hecho de aceptar la jefatura de la Casa Civil demuestra la grandeza y humildad de Lula y desmiente a quienes desde hace cinco años “especulan y apuestan por una separación entre nosotros”.
La jefa de Estado subrayó: “siempre estuvimos del mismo lado y compartimos un proyecto extremadamente generoso para Brasil, para beneficiar a quienes siempre fueron excluidos. Por ellos estamos trabajando juntos otra vez” - texto completo