[Sputnik / elcomunista.net] - El excomandante del Ejército
boliviano, general Jorge Mendieta, fue puesto el miércoles en prisión
preventiva por seis meses, convirtiéndose en el segundo alto jefe
militar encarcelado en el inicio de un proceso por el golpe de 2019 en
el cual está acusada la expresidenta Jeanine Áñez.
«Se ha determinado seis meses de
prisión preventiva en el penal de San Pedro de La Paz, para permitir que
se desarrollen las investigaciones, sin obstaculizaciones», dijo a
reporteros la exdiputada Lidia Patty, denunciante principal en el «caso
golpe de Estado».
El pasado lunes fueron enviados a
detención preventiva por el mismo caso la expresidenta y sus exministros
de Justicia, Álvaro Coímbra, y de Energías, Rodrigo Guzmán, mientras
permanecen activas sendas órdenes de aprehensión contra los extitulares
de Gobierno, Arturo Murillo; de Defensa, Luis López, y de la
Presidencia, Yerko Núñez.
En el proceso también está detenido
preventivamente el exjefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas,
almirante Flavio Arce, y permanecen en paradero desconocido los
excomandantes en Jefe Williams Kaliman y Sergio Orellana, además de los
excomandantes de la Fuerza Aérea y de la Armada.
Los exjefes integraban el alto mando
militar que el 10 de noviembre sugirió la renuncia del entonces
presidente Evo Morales y están incluidos en la lista de procesados por
el golpe junto con la expresidente Áñez y varios de sus ministros.
La diputada Patty, del Movimiento Al
Socialismo de Morales y el actual presidente Luis Arce, dijo que espera
la detención de todos los acusados, incluido el exlíder cívico de Santa
Cruz (este), Luis Fernando Camacho, recién electo gobernador de ese rico
departamento.
La ola de detenciones ha desatado
protestas de sectores conservadores, con amenazas de paros regionales, a
la par de anuncios de movilizaciones de movimientos sociales próximos
al oficialismo que reclaman justicia por el golpe y la posterior cruenta
represión militar y policial -
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