La Organización Mundial de la Salud expone en un informe tajante el cúmulo de fallos. Describe cómo los gobiernos y las organizaciones de salud pública de todo el mundo han sido lentos e ineficaces a la hora de responder al coronavirus. Sorprende la torpeza de muchos países occidentales.
Sin preparación - El informe, elaborado por un grupo de expertos, comienza afirmando que el mundo no estaba preparado para esta pandemia. Sin embargo, durante décadas se había predicho que era inevitable una pandemia viral de este tipo.
Hace cinco años la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que había una necesidad urgente de investigar más sobre los coronavirus. Para los gigantes farmacéuticos esa investigación no era rentable en aquel momento y, por lo tanto, apenas se realizó. El afán de lucro primó sobre el interés general.
Ignorar las advertencias - Entonces llegó la pandemia. A principios de enero de 2020 se descubrió un nuevo coronavirus en Wuhan. El 24 de enero quedó claro que este virus podía transmitirse de persona a persona y que además era muy contagioso. Una semana después, el 30 de enero, la OMS declaró una emergencia médica internacional.
Algunos países no esperaron a esa declaración y pasaron inmediatamente a la acción. Así es como Vietnam ya introdujo el distanciamiento social y el endurecimiento de los controles fronterizos desde mediados de enero.
Ya el 12 de enero (¡!) Taiwán envió a dos
epidemiólogos a Wuhan para estudiar el virus. Desde principios de
febrero en muchos aeropuertos de África se examinó sistemáticamente a
los viajeros extranjeros - Leer más