x Pablo Nariño [Calpu / lahaine.org] - Es indudable que en Colombia habrá un levantamiento social, las causas
son miles, los EEUU y el régimen colombiano lo saben y se preparan para
reprimirlo violentamente
Amparado en el estado de emergencia, el gobierno colombiano se ha dedicado a expedir decretos-más de 40- y violar acuerdos; saquear recursos del Estado y entregarlos a banqueros, grandes industriales y altos empresarios; militarizar campos y ciudades.
Y a evaporar la soberanía, como el acto de obediencia a Craig Faller, jefe del Comando Sur de los EEUU y a Goldberg, embajador estadounidense en Colombia. La reciente entrada de la brigada élite del Ejército de EEUU es expresión de ello; ya estaban las bases, decenas de funcionarios y “asesores” norteamericanos en Colombia.
Hoy Duque oficializa el proceso de intervención militar.
Como era de esperarse, la emergencia sanitaria por el Covid-19 ha sido convertida en dispositivo de contrarreforma y acondicionamiento para un Estado autoritario y represivo, que se amolde a una fase próxima de reacomodamiento del capital financiero militarista global: la excusa perfecta para desatar el absurdo previsible del Plan Colombia 2.0 en medio de la pandemia.
La llamadas operaciones antidrogas, tan desacreditadas por su demostrada inutilidad y tan usadas como coartada para la intervención militar extranjera, la violencia contra el campesinado,
el favorecimiento a emporios como Bayer-Monsanto, y la entrega al capital privado y financiero de áreas del territorio nacional y sus recursos, hoy se relanzan sin mucha publicidad en varias regiones del país - Leer texto completo
Amparado en el estado de emergencia, el gobierno colombiano se ha dedicado a expedir decretos-más de 40- y violar acuerdos; saquear recursos del Estado y entregarlos a banqueros, grandes industriales y altos empresarios; militarizar campos y ciudades.
Y a evaporar la soberanía, como el acto de obediencia a Craig Faller, jefe del Comando Sur de los EEUU y a Goldberg, embajador estadounidense en Colombia. La reciente entrada de la brigada élite del Ejército de EEUU es expresión de ello; ya estaban las bases, decenas de funcionarios y “asesores” norteamericanos en Colombia.
Hoy Duque oficializa el proceso de intervención militar.
Como era de esperarse, la emergencia sanitaria por el Covid-19 ha sido convertida en dispositivo de contrarreforma y acondicionamiento para un Estado autoritario y represivo, que se amolde a una fase próxima de reacomodamiento del capital financiero militarista global: la excusa perfecta para desatar el absurdo previsible del Plan Colombia 2.0 en medio de la pandemia.
La llamadas operaciones antidrogas, tan desacreditadas por su demostrada inutilidad y tan usadas como coartada para la intervención militar extranjera, la violencia contra el campesinado,
el favorecimiento a emporios como Bayer-Monsanto, y la entrega al capital privado y financiero de áreas del territorio nacional y sus recursos, hoy se relanzan sin mucha publicidad en varias regiones del país - Leer texto completo