Por Andrés Pachón - BOGOTÁ
(Sputnik) — Tras la terminación en abril del cese el fuego unilateral
del ELN como gesto "humanitario" ante el avance del COVID-19, la
actividad de ese grupo guerrillero se mantuvo en niveles bajos en
términos históricos, aunque eso podría cambiar si las recién llegadas
tropas de EEUU se encuentran con rebeldes en el campo.
La sola confirmación del Gobierno de que 53 efectivos de las Brigadas de Seguridad de la Fuerza de Asistencia
(SFABs, por sus siglas en inglés) estadounidense llegaron el pasado 1
de junio de al país para brindar asesoría en la lucha contra el
narcotráfico ha servido para crispar los nervios de muchos y desatar los
comentarios de otros más, que aseguran que todo es parte de una
estrategia para atacar a Venezuela.
"Si a usted le llevan tropas a los
barrios de Cúcuta (nordeste, frontera con Venezuela), como ocurrió en el
mes de abril, o si las llevan ahora a Arauca o al Catatumbo (nordeste),
y se van a encontrar con comandos nuestros, pues tendrá que haber algún
choque", dijo el miércoles 'Pablo Beltrán', jefe negociador de paz del
Ejército de Liberación Nacional (ELN) en diálogo con el noticiero local
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