[Sputnik / elcomunista.net ] - Las economías regionales de las zonas
más pobres de Argentina profundizan su agroindustria, una estrategia que
provoca graves consecuencias ambientales y sociales como producto de la
deforestación: inundaciones, epidemias, contaminación, extinción de
especies, entre otros.
Por Francisco Lucotti* - Argentina está entre los primeros 10
países y comunidades del mundo en producción de alimentos (incluyendo a
la Unión Europea), y aproximadamente 60% de sus exportaciones son
materias primas.
La cosecha de granos y cereales a gran escala, en
especial de la soja, así como la exportación de carnes y vinos, son de
los pocos sectores competitivos para una nación inmersa en una grave
crisis económica.
Pero no todas las provincias del país se
ven bendecidas por esta situación, principalmente reservada por su
vastos pastizales para la llamada Pampa húmeda.
Es por esto que, como
ocurre en la Amazonía brasileña, la deforestación de bosques y selvas se
ha transformado en una polémica alternativa para los interesados en
expandir esas zonas tropicales dedicándolas a la ganadería y la
agricultura, con graves consecuencias ambientales y sociales - Leer texto completo