[Sputnik / elcomunista.net] - La crisis de COVID-19 ha acelerado un cambio sísmico en la industria mundial de la refinación. Mientras EEUU está cerrando sus refinerías, China lanza nuevos proyectos para procesar el crudo.
El gigante asiático destronará a Estados Unidos ya el año que viene, pronostican los analistas, citados por Bloomberg.
A principios de este noviembre, Royal Dutch Shell Plc cerró su refinería Convent en Louisiana. A diferencia de muchas refinerías de petróleo cerradas en los últimos años, Convent estaba lejos de ser obsoleta: es bastante grande y capaz de refinar una amplia gama de petróleo crudos.
Sin embargo, Shell, la tercera mayor empresa petrolera del mundo, quería reducir radicalmente la capacidad de refinación, pero no pudo encontrar ningún comprador.
Mientras tanto, en el otro lado del Pacífico, China puso en marcha una nueva unidad del gigantesco Rongsheng Petrochemical en Zhejiang, en el noreste de China.
Es solo uno de al menos cuatro proyectos en el país con un total de 1,2 millones de barriles al día de capacidad de procesamiento de crudo, observa la agencia Bloomberg.
El medio señala que en China y el resto de Asia las economías se están recuperando rápidamente de la pandemia. En cambio, las refinerías de Estados Unidos y Europa están lidiando con una crisis económica más profunda - Leer texto completo