(RT / elcomunista.net) - El documento enumera las múltiples violaciones a los derechos humanos cometidas por el régimen de Jeanine Áñez.
Durante los primeros meses del Gobierno de Jeanine Áñez, las protestas pacíficas se reprimieron violentamente en Bolivia. Policías y militares dispararon a manifestantes desarmados. A algunos de ellos, los mataron en ejecuciones sumarias. Centenares más quedaron heridos. La persecución en contra de opositores, los ataques a la libertad de prensa y las detenciones arbitrarias fueron masivas.
También hubo torturas, violaciones al debido proceso y agresiones sexuales, en particular en contra de las mujeres. A los familiares de las víctimas los maltrataron. A las y los detenidos los obligaban a desnudarse y los amenazaban con violarlos o asesinarlos. Las fuerzas de Seguridad y Armadas trataron de culpar a los manifestantes. Incluso les «sembraron» armas. Las autoridades entorpecieron las investigaciones.
Y el
racismo endémico cargado de odio hacia los pueblos originarios que
arrastra Bolivia se reavivó y promovió desde el Estado. Al grito
de: «¡indios de mierda!», se validaron todo tipo de abusos dirigidos
principalmente hacia las indígenas - Leer màs + vìdeos