Reapareció Vladimiro Montesinos, el oscuro y poderoso personaje de la dictadura de Alberto Fujimori, encargado de los trabajos sucios durante el régimen fujimorista.
Lo ha hecho maniobrando desde su celda para intentar voltear el resultado de las elecciones que ha ganado el profesor y sindicalista de izquierda Pedro Castillo y favorecer a la derrotada Keiko Fujimori, hija del dictador al que sirvió durante diez años.
Audios difundidos por el excongresista y exministro de Justicia Fernando Olivera revelan conversaciones de Montesinos con un militar en retiro, en las que hablan de comprar los votos de los magistrados del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) para que apoyen las demandas de Keiko, que pretende anular unos 200 mil votos en las zonas rurales donde Castillo triunfó ampliamente y así ganar las elecciones que perdió en las urnas.
Esos pedidos de nulidad de votos están siendo vistos en el JNE, que tiene la decisión final sobre el tema.
El interlocutor de Montesinos en esos diálogos es el comandante en retiro Pedro Rejas, conocido operador fujimorista. Rejas fue quien grabó esos diálogos. Montesinos, un excapitán del ejército, habla desde la prisión de la Base Naval, en la que está recluido desde el año 2001 en una celda unipersonal de lujo.
La Marina, que administra el penal, ha señalado que en los días que se dieron los diálogos difundidos el exasesor de Fujimori fue autorizado a utilizar un teléfono de la cárcel para supuestamente hablar con su pareja.
Se ha abierto una investigación por estas llamadas.
Montesinos llamó al comandante Rejas el 10 de junio, cuando el fujimorismo ya había presentado sus demandas para anular votos de Castillo, para decirle que contacte al abogado Guillermo Sendón para a través suyo acceder a los magistrados del JNE, que tiene cuatro miembros, y comprar sus votos para favorecer a Keiko. Le dice que necesitan asegurar tres votos.
Rejas cumplió el encargo, llamó a Sendón ese mismo día y ambos se reunieron. El abogado le reveló al comandante su amistad con el magistrado del JNE Luis Arce y le señaló que a través de éste también se podía “arreglar” los votos de otros dos magistrados para hacer una mayoría de tres.