(Sputnik / elcomunista.net) - El movimiento político ecuatoriano Revolución Ciudadana, cuyo máximo líder es el expresidente Rafael Correa (2007-2017), rechazó el viernes la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Londres que abrió la puerta para la extradición a Estados Unidos del fundador de Wikileaks, Julian Assange, ante un posible juzgamiento con pena de muerte.
«La Revolución Ciudadana rechaza la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Londres de aprobar la extradición a Estados Unidos del periodista y fundador de Wikileaks, Julian Assange.
Esto pone en riesgo su vida, pues el país que lo requiere puede juzgarlo con pena de muerte», dijo el movimiento político en un comunicado.
En Estados Unidos, Assange está acusado de cargos por espionaje y piratería informática tras la publicación en 2010 de cientos de miles de páginas de documentos militares secretos sobre las actividades del país norteamericano en las guerras en Irak y Afganistán, que fueron difundidos a través del portal Wikileaks.
En el comunicado, Revolución Ciudadana hizo un llamado para que se ponga fin a lo que señaló como persecución política y se retiren los cargos en contra de Assange.
Según el movimiento político, la criminalización de los denunciantes y periodistas de investigación no tiene cabida en verdaderas democracias y va en contra del derecho a la libertad de prensa.
Assange permaneció en condición de asilado político en la embajada de Ecuador en Londres desde el 16 de junio de 2012 hasta el 11 de abril de 2019.
La administración de Lenín Moreno (2017-2018) concedió a Assange la nacionalidad ecuatoriana como parte de una estrategia para poner fin a su asilo continuado en la embajada y habilitar su deportación a Ecuador, pero el esfuerzo fracasó, ya que Londres alertó que no aceptaría esa decisión unilateral y que el activista sería detenido apenas saliera de la sede diplomática.
En 2019, Moreno hizo un cambio drástico de estrategia en el caso Assange, a quien ya había calificado de «molestia» para su Gobierno: le retiró el asilo y la nacionalidad, señalando que esta había sido otorgada con irregularidades y atribuyendo la decisión a una resolución casi individual de su entonces canciller María Fernanda Espinosa.
Ese año, el activista abandonó la embajada y fue detenido.
Según el movimiento Revolución Ciudadana, el Gobierno de Moreno, secundado por su ministra de Gobierno, María Paula Romo, y por el entonces canciller José Valencia, violó los derechos humanos de Assange, pues no respetaron su estatus internacional de asilado al permitir el ingreso de actores de otros países a la sede de la Embajada - Ver texto