[Sputnik / elcomunista.net] - Pobladores de la ciudad minera boliviana de Potosí (suroeste) rompieron el viernes el silencio de la cuarentena con un cacerolazo, salpicado con incontables explosiones de petardos, en demanda de un laboratorio local de covid-19, reportaron medios locales.
«Todo este tiempo hemos estado viviendo engañados, porque jamás iba a funcionar tal laboratorio hasta fecha 20 de mayo, como prometió el Gobierno», dijo el alcalde de esa ciudad, Luis Alberto López, a la cadena radial Erbol, justificando la protesta.
El «cacerolazo, petardazo y carajazo» fue convocado por el Comité Cívico Potosinista (Comcipo), que agrupa a diversas instituciones de la sociedad civil, luego de que medios de esa ciudad confirmaran el incumplimiento de la promesa gubernamental.