[Sputnik / elcomunista.net] - El 1 de mayo de 1960 se produjo uno de
los episodios más tensos de la Guerra Fría. Mientras la Unión Soviética
celebraba el Primero de Mayo o Día del Trabajo, un avión espía
estadounidense U-2 era derribado en el territorio del país.
Estas aeronaves, capaces de volar a alturas por encima de los 21.000
metros, lo que las hacía inalcanzables para los cazas y los misiles
soviéticos, comenzaron a realizar sus misiones secretas en 1956.
Volando a esa altura, en la estratosfera, el U-2 podía fotografiar
importantes instalaciones soviéticas, en imágenes en las cuales se podía
ver hasta la matrícula de los aviones en tierra.
Para entonces, los estadounidenses, seguros de la superioridad
tecnológica de su avión sobrevolaron impunemente la URSS durante algunos
años, pero la situación cambió el 1 de mayo de 1960.
Esa mañana un U-2
pilotado por Francis Gary Powers, de 30 años, despegó de la base
estadounidense en Peshawar (Pakistán), su misión era fotografiar las
instalaciones militares e industriales soviéticas - Leer texto completo