[Sputnik / elcomunista.net] - El Teatro Bolshói fue uno de los pocos
lugares donde Iósif Stalin, el líder soviético, aparecía en público. La
inteligencia alemana decidió aprovechar esa circunstancia en otoño de
1944 para asesinarlo en un momento crucial de la Gran Guerra Patria
(1941-1945), como se conoce en Rusia a la Segunda Guerra Mundial.
Solo recientemente se han hecho público
los documentos relacionados con una de las operaciones de
contraespionaje soviético llevadas a cabo cuando la victoria sobre la
Alemania Nazi estaba cerca.
La operación pasó a la historia bajo el
nombre en clave de Tumán (Niebla). Y hoy en día, 75 años después del
final de la guerra, los informes formales de la Inteligencia soviética
parecen una novela de aventuras.
La situación en el frente en aquel entonces empujó al alto mando nazi a intentos desesperados para salvar la situación.
Tras el fracaso del intento de asesinato
del líder soviético en la Conferencia de Teherán de 1943, la
Inteligencia militar alemana, Abwehr, estaba a la espera de su próxima
oportunidad. La encontraron en el amor que sentía Stalin por el Bolshói - Leer texto completo + fotos