[Sputnik / elcomunista.net] - La tensión entre EEUU y China va en
escalada. El presidente Donald Trump acusa al gigante asiático de ser
responsable por la pandemia del COVID-19 y de querer entorpecer su
reelección. Desde China desmienten estas denuncias.
La acusación contra China haciéndola
responsable del COVID-19 inició pocas semanas después de detectarse el
virus en la ciudad de Wuhan. De un video viral de una joven asiática
comiendo sopa de murciélago, que fue descontextualizado y que
provocó
una ola xenofóbica mundial contra los chinos, se pasó a señalar a un
laboratorio bioquímico de Wuhan y a declaraciones frontales de las
máximas autoridades del Gobierno estadounidense, como lo hizo
recientemente el secretario del Departamento de Estado, Mike Pompeo.
El máximo responsable de la diplomacia
estadounidense aseguró que «China representa una amenaza para el mundo» e
hizo un llamado a sus aliados a unir presión contra el gigante
asiático, tal como lo han hecho Reino Unido, Francia, Australia, que han
pedido abrir una investigación sobre el origen del virus.
Los señalamientos contra China son
repetidos a diario por dirigentes políticos del Partido Republicano
estadounidense, corporaciones mediáticas y ejecutivos de medios como
Steve Banon, ex asesor del presidente Trump y su gran amigo Guo Wengui,
un multimillonario chino que en 2014 huyó a EEUU luego de ser acusado
por la justicia china de corrupción y lavado de dinero, y que desde
entonces amenaza con acabar con el Partido Comunista de China.
Sobre este tema, Sputnik conversa con el
periodista francés,Thierry Meyssan, director del medio de comunicación
digital Red Voltaire, autor de numerosos libros, entre ellos: De la
impostura del 11 de septiembre a Donald Trump, Pentagate y La gran
impostura - Leer texto completo