x Jorge Zabalza [lahaine.org] - ¿Tienen derecho los más humildes a un techo digno?
Por supuesto. ¿Es legítimo que ocupen tierra para construir su futuro
hogar? Claro que sí. A partir de estos interrogantes
filosófico-jurídicas -y de sus respuestas- el doctor Helios Sarthou
había elaborado su "doctrina okupa" a la uruguaya, alguna que otra
decena de miles deben la posesión del solar donde levantaron su hogar.
Un par de centenas de miles no pueden acceder al terreno donde construir un techo digno, se los impide el monopolio del negocio inmobiliario urbano.
Es la estructura de la propiedad la evidente razón de las desigualdades en el uso de la tierra, el problema básico, fundamental, de Uruguay y de América Latina. Mientras no se resuelva, siempre habrá ciudadanos y ciudadanas sin techo donde guarecer a sus hijas e hijos.
Por su parte, el Estado no cubre el déficit habitacional. El déficit afecta a las trabajadoras y los trabajadores más empobrecidos y, en especial, a los más jóvenes y excluidos de la vida social y política.
Irresponsabilidad total de los gobiernos que, sean del color que fueren, se comen el futuro. El tan mentado Estado de Derecho, diamante del pensamiento liberal, protege solamente los privilegios de la cumbre, indiferente a las necesidades de los de abajo, reducidos a la marginación.
Mas que indiferente, los empuja hacia el estado de permanente necesidad. El actual "ordenamiento territorial" arroja al precipicio multitudes, es una masacre masiva e impune - Leer texto completo
Un par de centenas de miles no pueden acceder al terreno donde construir un techo digno, se los impide el monopolio del negocio inmobiliario urbano.
Es la estructura de la propiedad la evidente razón de las desigualdades en el uso de la tierra, el problema básico, fundamental, de Uruguay y de América Latina. Mientras no se resuelva, siempre habrá ciudadanos y ciudadanas sin techo donde guarecer a sus hijas e hijos.
Por su parte, el Estado no cubre el déficit habitacional. El déficit afecta a las trabajadoras y los trabajadores más empobrecidos y, en especial, a los más jóvenes y excluidos de la vida social y política.
Irresponsabilidad total de los gobiernos que, sean del color que fueren, se comen el futuro. El tan mentado Estado de Derecho, diamante del pensamiento liberal, protege solamente los privilegios de la cumbre, indiferente a las necesidades de los de abajo, reducidos a la marginación.
Mas que indiferente, los empuja hacia el estado de permanente necesidad. El actual "ordenamiento territorial" arroja al precipicio multitudes, es una masacre masiva e impune - Leer texto completo