(Sputnik / elcomunista.net) - La plaga de la corrupción se cierne de nuevo sobre el primer ministro británico, Boris Johnson, quien ha perdido en las últimas 48 horas la autoridad entre sus correligionarios conservadores y apoyos en la intención de voto del electorado.
Por Lourdes Gómez* - «¿Está alguien al mando en Downing Street?», cuestionó en portada el medio Daily Mail en su edición impresa del 5 de noviembre. Esta noche se celebra en el Reino Unido ‘La conspiración de la pólvora’, cuando rebeldes católicos intentaron asesinar al rey Jacobo I, en 1605.
Fueron arrestados antes de que prendieran la mecha con la que querían volar el Parlamento británico y su acto de traición se rememora con hogueras y fuegos artificiales.
HUMILLACIÓN Y FURIA - Medios tan conservadores como Daily Mail probablemente desearían quemar este año la efigie del primer ministro. No tanto por su cuna católica, sino por el sorprendente gol que ha metido en su propia portería, arrastrando en la humillante derrota a sus filas conservadoras.
«Un día de farsa… volantazo ‘tory’ respecto al deshonrado diputado ante la furia del público…», resumió el rotativo horas antes de que el Gobierno reconociera su «error» en el nuevo escándalo de corrupción política.
La conspiración se urdió entre el ala dura conservadora y Downing Street. Johnson defendió y pidió el voto de la Cámara a una moción que congeló la suspensión parlamentaria, durante un mes, del exministro euroescéptico Owen Paterson.
Era el castigo recomendado por el comité mixto en la materia para el diputado ‘tory’ como consecuencia del más «atroz» tráfico de influencias «en beneficio» de dos empresas, que le pagaban más de 100.000 libras (por encima de 120.000 euros) al año por su trabajo de asesoría - Leer màs