viernes, 26 de noviembre de 2021

Colombia y Panamà - más de 30.000 niños cruzaron el Tapón de Darién este año para llegar a Norteamérica

(Sputnik / elcomunista.net) - Más de 125.000 personas, entre las que hay 30.000 niños que en su mayoría tienen menos de cinco años, pusieron en riesgo sus vidas al cruzar la selva del Tapón del Darién, que se extiende en la frontera entre Panamá y Colombia, con la esperanza de llegar a Estados Unidos, Canadá o México.

«Al menos 30.000 niños, la mayoría menores de cinco años, se encuentran entre las más de 125.000 personas que este año han arriesgado sus vidas al cruzar el Tapón de Darién», informó la Organización Internacional de Migraciones (OIM) este viernes.

El tránsito desde América del Sur de migrantes provenientes del Caribe, Asia, África y las Américas ha tenido lugar desde hace una década, pero en los últimos tiempos aumentó de manera dramática por el impacto socio-económico, sanitario y político de la pandemia del covid-19, destacó el organismo.

«El número total de cruces irregulares del Darién, un traicionero paso selvático en la frontera entre Colombia y Panamá sin carreteras donde estén activos grupos armados, traficantes de migrantes y traficantes de personas, es más alto este año que durante todo el período 2010-2020», reseñó la OIM.

Una de cada cuatro personas que cruza por el Tapón de Darién son niños, advirtió la entidad.

Este año atravesaron por este lugar 24.000 infantes que tenían cinco años o menos, añadió la Organización.

Muchos de los migrantes que se encuentran en tránsito son haitianos, aunque también hay otros ciudadanos de países del Caribe, Asia, África y las Américas.

Los migrantes africanos en Sudamérica aumentaron de 22.000 en 2010 a 43.000 en 2020, mientras que los migrantes del Caribe en la región crecieron de 79.000 en 2010 a 424.000 el año pasado.

«Los migrantes asiáticos en la región también aumentaron de 208.000 en 2010 hasta 302.000 en 2020», reveló la OIM.

Al no poder utilizar las rutas migratorias regulares, muchas personas recurren a contrabandistas, lo que aumenta su vulnerabilidad, de acuerdo al estudio de la organización.

En estos flujos migratorios se encuentran ciudadanos que se asentaron durante los últimos años en países de América del Sur, entre ellos Brasil y Chile.

El estudio de la OIM señala que algunos migrantes en tránsito hacia América del Norte desde el Caribe, África y Asia tienen niños que son nacionales de países sudamericanos, por lo que no son exclusivamente migrantes del Caribe.

Muchos de quienes cruzan el Tapón de Darién se han visto forzados a migrar a otros destinos, en el norte del continente, debido a que no cuentan con la documentación adecuada o debido a las consecuencias de la pandemia, «incluyendo un aumento alarmante de la xenofobia, lo que limita su acceso a servicios básicos», añadió la OIM.

El organismo también menciona la inestabilidad política y los desastres naturales como otros de los motivos que fuerzan a atravesar la infranqueable selva que constituye el Tapón de Darién.

La OIM ha pedido 74,7 millones de dólares para asistir a los migrantes en tránsito y para ayudar a que los países de destino actuales puedan afrontar los impactos negativos de la crisis - Ver texto