Varias metrópolis europeas constatan una reducción demográfica, causada tanto por los efectos de la pandemia del covid-19, como por problemas preexistentes, que incluyen la concentración excesiva de la población y el alto costo de la vida.
Por Aleksandr Dunaev* - El 20 por ciento de la población europea reside en las 48 ciudades más dinámicas de Europa, entre ellas Londres, Madrid, Milán, Múnich, París y Ámsterdam, las cuales, sin embargo, aseguran el 43 por ciento de crecimiento del PIB del Viejo Continente y el 35 por ciento del aumento de los puestos de trabajo en las últimas dos décadas, según un estudio de la consultora internacional Mckinsey.
Sin embargo, este año las urbes, centros neurálgicos de la economía, se enfrentan con un desafío inusual, que podría cambiarlas para siempre.
COVID-19 Y TELETRABAJO: FACTORES DE DESPOBLACION - En 1973 la población de Milán llegó a 1.743.427 personas, el nivel más alto de su historia. Poco después empezó una despoblación que duró más de 30 años y costó a la urbe lombarda casi medio millón de habitantes.
En la última década la
demografía milanesa empezó a recuperarse, alcanzando la cuota de
1.400.000 personas - Leer texto completo