[Sputnik / elcomunista.net] - El 4 de noviembre de 1995 el primer ministro de Israel, Yizhak Rabin, promotor de los acuerdos interinos de Oslo con los palestinos, fue tiroteado por un israelí opuesto a las conversaciones de paz, 25 años después ni el magnicidio ha sido superado ni parece que la paz con los palestinos esté tan cerca como entonces.
El Instituto para la Democracia de Israel (IDI) publicó con motivo del vigésimo quinto aniversario del asesinato de Rabin un sondeo en el que el 45 por ciento de los ciudadanos cree que otro asesinato político es posible y grandes cantidades de votantes de izquierda, ultraortodoxos y árabes israelíes se ven como objetivos de la incitación.
No solo eso, paradójicamente el actual primer ministro, Benjamin Netanyahu, también dice sentirse acosado y en peligro.
Netanyahu ha sido acusado a lo largo de estos 25 años de haber sido uno de los instigadores de la incitación contra Rabin durante los difíciles años de la primera intifada (levantamiento, en árabe) y el acercamiento a los palestinos, cuando aparecían
en las ciudades israelíes montajes de fotos de un Rabin con
kefia, el pañuelo tradicional palestino, colocado al modo en que lo
llevaba Yaser Arafat, líder de la Organización para la Liberación de
Palestina (OLP) o un Rabin con uniforme nazi, y también se recuerdan y
retransmiten manifestaciones de los años 90 en las que Netanyahu era
jaleado y el público gritaba «Rabin traidor» - Leer texto completo