[Sputnik / elcomunista.net] - La huida a Madrid del dirigente opositor venezolano Leopoldo López abre un nuevo escenario de tensión diplomática entre Venezuela y España, a quien el Gobierno de Nicolás Maduro acusa de actuar como cómplice en la fuga.
Por Daniel Martín* - «El Reino de España participa activamente en la fuga ilegal de un peligroso delincuente y decide recibirlo en su territorio», reza un comunicado emitido por la Cancillería venezolana el 25 de octubre, un día después de que López abandonara la residencia del embajador español en Caracas.
López se instaló en las dependencias del embajador, tras abandonar su arresto domiciliario en abril de 2019 para participar en el intento de alzamiento militar encabezado por el líder opositor Juan Guaidó.
La decisión del embajador Jesús Silva de acoger a López sigue a día de hoy siendo condenada por Venezuela, que acusa a España de cobijar a un «prófugo» condenado por «la muerte y lesiones de centenares de personas» durante las protestas antigubernamentales de 2014.
Además la Cancillería venezolana afirma que España incumplió de forma reiterada su promesa de impedir que López desarrollara actividades políticas durante su estancia en la sede diplomática - Leer texto completo