[Sputnik / elcomunista.net] - Es curiosa la relación que tiene Argentina con su propia superficie, expuesta como nunca durante la pandemia del coronavirus. Es el octavo país más grande del mundo, pero situado en el puesto 31 de la tabla de la población.
Por Ramiro Barreiro* - El contexto actual, dominado por una enfermedad que pega más duro en las aglomeraciones urbanas, tuvo mayor impacto en la sobrecargada Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), la conjunción entre la Ciudad de Buenos Aires -capital del país- y su extrarradio, el Conurbano.
Aun en las últimas semanas, en las que el virus se federalizó, el área siguió reuniendo el 40 por ciento de los contagios totales.
A vuelo de satélite, el AMBA es una gran mancha de luces de tamaño desproporcionado a las otras manchas que la circundan. La zona, administrada por apenas dos provincias (la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires) y una treintena de municipios, concentra tres cuartas partes de la población argentina.
Sin embargo, y más allá del deseo de emigrar que muchos bonaerenses expresan ante cada crisis, nadie parece querer mudarse de Buenos Aires a otra provincia del país - Leer texto completo