[Sputnik / elcomunista.net] - El nuevo inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden parece dispuesto a recuperar el diálogo con Irán sobre el desarrollo de la energía atómica, aunque debe darse prisa y tomar decisiones maximalistas en un breve plazo. Su voluntad expresada tiene que ir acompañada de hechos.
Por Francisco Herranz* - Ahora se trata de convencer a los iraníes para que regresen a la mesa de negociaciones y abandonen su programa de enriquecimiento de uranio, tarea difícil ya que el acuerdo que regula ese aspecto, suscrito en 2015, pende de un hilo muy fino.
Después de que Donald Trump se retirará unilateralmente, en 2018, del citado acuerdo, firmado por Irán con seis grandes potencias, Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido, Francia y Alemania, y conocido como Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), los europeos han tratado de apuntalar el pacto, decisivo para la estabilidad de Oriente Medio,
pero sus esfuerzos quedaron ensombrecidos por la estrategia del entonces presidente norteamericano de presionar al máximo, aislando diplomática y económicamente a Irán con un sinfín de sanciones.
Primeros pasos de Biden - Las primeras intenciones expresadas por Joe Biden apuntan en buena dirección, pero tienen que confirmarse en actos. Es positivo que haya nombrado como su asesor en este tema —enviado especial a Irán a Robert Malley, quien ya desempeñó un papel determinante en el acuerdo de 2015 y estaba presente en el arranque de aquellas negociaciones en Omán - Leer texto completo