Hace unos pocos años escribí un artículo periodístico con el mismo
título de este libro, tras haber leído un estimulante ensayo de Edward
Herman sobre los crímenes económicos de guerra.
En la nota señalada, yo
hacía alusiones directas a este tipo de criminalidad, pero, dado el
carácter del escrito, no las acompañé con pies de página ni referencias
bibliográficas, aunque me había documentado ampliamente para elaborarla.
Algunas de las personas a las que les envié el artículo me señalaron
que, teniendo en cuenta la falta de sustento bibliográfico, les parecía
que las afirmaciones que hacía no estaban suficientemente respaldadas,
insinuando, en algunos casos, que debía volver a escribir el texto.
Esta actitud mostraba de alguna forma la resistencia a la manera como yo presentaba a los economistas neoliberales, a los que dejaba de observar como simples tecnócratas ocupados en el manejo de complicados sistemas de análisis o como gestores intelectuales de política económica, para considerarlos como vulgares criminales de guerra - Leer libro completo [PDF]