lunes, 26 de julio de 2021

Cuba - Por qué tenemos un Bloqueo económico impuesto por EEUU desde hace más de 60 años

x Agustìn Lage Dàvila (lahaine.org) - La propaganda anti-cubana que viene del norte intenta presentar el bloqueo a Cuba como una reacción a los fracasos de la Revolución

Les aseguro que puedo hacer un discurso revolucionario de barricada, y que la justa indignación que motiva el recrudecimiento del bloqueo, la inmoral apelación a la mentira en las redes sociales y la instigación planificada al odio y al delito en los acontecimientos de los últimos días, nos llama a ese discurso.

Lo haré muy probablemente en otro momento. Pero en esta nota de hoy haré un esfuerzo por refrenar emociones, para poder hablar del bloqueo a Cuba en el frio lenguaje de los datos.

El 80% (79.8%) de los cubanos de hoy nació después del triunfo de la Revolución en 1959 (y también después de la imposición del Bloqueo por el presidente JF Kennedy en 1962). No conocieron sino a través de padres y libros lo que era Cuba en los años 50.

Era un país:

  • Condenado al monocultivo, donde el azúcar era el 80% de las exportaciones
  • Donde inversionistas norteamericanos controlaban entre muchas otras cosas, el 90% de la telefonía, el 70% de la refinación de petróleo, el 100% de la producción de Níquel y el 50% del ferrocarril
  • Donde las empresas farmacéuticas norteamericanas controlaban el 70% del mercado nacional de medicamentos
  • En que apenas el 3% de los campesinos era dueño de la tierra
  • En que apenas el 4% de los niños en el campo comían carne y el 11% tomaban leche
  • Con una tasa de mortalidad infantil de 65 por 1000 nacimientos
  • Con una esperanza de vida al nacer de 62 años
  • Con una cobertura gubernamental de servicios de salud estimada en 6%
  • Con un 30% de analfabetismo y apenas el 55% de los niños en la escuela
  • Con una tasa de desempleo de 35%
  • Donde apenas el 22% de las viviendas era propiedad de sus habitantes, y el 72% de ellas carecía de servicios sanitarios y el 42% de electricidad - Leer màs