(Sputnik / elcomunista.net) - La Defensoría del Pueblo de Colombia reveló el miércoles que un indígena de 17 años murió tras resultar herido el lunes en un bombardeo militar contra un campamento de las disidencias de la antigua guerrilla de las FARC, en el municipio de San Vicente del Caguán (Caquetá, sur).
«La Defensoría activó desde el primer momento la ruta de protección para el joven que resultó herido tras un operativo del Ejército en San Vicente del Caguán y hoy falleció en la Clínica Medilaser de Florencia», capital del Caquetá, dijo la Defensoría en un comunicado.
En el bombardeo, realizado en la aldea La Esperanza, murieron cinco disidentes de las FARC, según la Defensoría, que pidió a las autoridades judiciales verificar si resultaron afectados otros menores.
El joven fue identificado como Yeison Stiven Yule Pequi, perteneciente al resguardo indígena Altamira.
«La situación desencadenada por el bombardeo contra las disidencias pone en evidencia la grave situación de reclutamiento forzado en las zonas objeto de dominio territorial y combate por parte de estos grupos armados ilegales», dijo el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, citado en el comunicado.
Asimismo, indicó que la Defensoría hace un acompañamiento a la familia del joven, «quien había sido víctima de reclutamiento desde hace un año».
El funcionario también le solicitó a las autoridades judiciales priorizar las investigaciones correspondientes sobre el hecho.
El organismo indicó que un equipo de la Defensoría en Caquetá está presente de manera permanente en la zona de alta incidencia de reclutamiento forzado de menores y que allí se recibirán quejas y peticiones por parte de la comunidad.
El pasado 2 de marzo, tras otro bombardeo militar a las disidencias de las FARC bajo el mando de Miguel Botache, alias ‘Gentil Duarte’, en el municipio de Calamar (Guaviare, sur), se denunció la muerte de 14 menores que también fueron reclutados por ese grupo ilegal.
Sin embargo, el estatal Instituto Nacional de Medicina Legal indicó que de entre los 12 cuerpos que recibió sólo había uno de una menor de 16 años.
En agosto de 2019 un total de ocho menores murieron en otro bombardeo militar a un campamento de las disidencias de las FARC.
El hecho fue denunciado en el Congreso por el senador opositor Roy Barreras, lo que generó la renuncia del entonces ministro de Defensa, Guillermo Botero, quien no se había pronunciado públicamente sobre la muerte de los menores en ese operativo - Ver texto