[Sputnik / elcomunista.net] - El Parlamento de Estados Unidos estuvo durante más de cuatro horas inmerso en el caos y la violencia después de que una turbamulta de simpatizantes de Donald Trump asaltara en la tarde del miércoles 6 de enero los accesos del Capitolio,
situado en pleno centro de Washington, forzando a los congresistas a suspender abruptamente la sesión protocolaria que al final certificó a Joe Biden como el próximo presidente norteamericano.
Por Francisco Herranz* - Habría que remontarse a principios del siglo XIX para asistir a un hecho de tan extrema gravedad como el que se ha visto. Hasta ahora la sede del poder legislativo estadounidense sólo había sido asaltado una vez en toda la Historia.
Fue concretamente el 24 de agosto de 1814, cuando tropas británicas dirigidas por el general Robert Ross invadieron la capital e incendiaron varios edificios gubernamentales, incluidos el Capitolio y la Casa Blanca que por aquel entonces se llamaba la Mansión Presidencial.
La diferencia esencial entre ambos escenarios radica en que los autores del asalto de ahora no eran extranjeros ni enemigos sino ciudadanos estadounidenses llegados de Kentucky, Kansas o Iowa tras ser animados nada menos que por el jefe de Estado - Leer texto completo