(Sputnik / elcomunista.net) - Dos periodistas de un equipo de filmación de RT France, detenidos en la frontera polaco-bielorrusa, fueron condenados a pagar una multa, reveló este lunes Xenia Fiódorova, editora principal del canal de televisión.
«Después de muchas horas de interrogatorio, finalmente se ha logrado contactar con nuestros periodistas. Ellos fueron sentenciados a una multa y aún no les entregaron los pasaportes. Estamos esperando que hagan sus comentarios tan pronto como lleguen al hotel», escribió Fiódorova en su canal de Telegram.
El corresponsal de RT France David Khalifa y el cámara Jordi Demory fueron detenidos este lunes en Polonia cerca de la frontera con Bielorrusia.
Según comunicaron las fuerzas del orden de Polonia, los reporteros supuestamente se encontraban ilegalmente en una zona de emergencia.
Por su parte, la editora de RT expresó la esperanza de que la detención del equipo de filmación no estuviera relacionado con el hecho de que los periodistas trabajan para RT, y agregó que ellos llegaron a la frontera con sus credenciales.
Fiódorova también indicó a Sputnik que los miembros del equipo podían no estar al tanto de la zona de emergencia de tres kilómetros que existe en la frontera.
Polonia decretó un estado de emergencia desde principios de septiembre en los territorios fronterizos con Bielorrusia. Solo pueden permanecer allí los residentes locales y las personas que tienen unos permisos especiales. La zona de emergencia se extiende a unos tres kilómetros desde la línea fronteriza.
La medida se tomó en respuesta a una avalancha de cruces ilegales desde Bielorrusia que denuncian en los últimos meses Polonia, Lituania y Letonia, acusando a Minsk de orquestar una crisis migratoria en represalia a las sanciones occidentales.
De acuerdo con las autoridades polacas, unos 3.500 migrantes se encuentran ahora en la frontera entre Bielorrusia y Polonia.
Las autoridades bielorrusas rechazan esas acusaciones.
El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, hostigado por las sanciones de Occidente tras su polémica reelección en agosto de 2020 y la represión de las protestas que siguieron al supuesto fraude en las urnas, advirtió que Minsk no tiene «ni dinero ni fuerza» para contener el flujo migratorio - Ver texto
