(RBTH / elcomunista.net) - Muchos historiadores coinciden en que fue una cuestión de honor: el caza ruso se vengó del ataque que dos días antes los estadounidenses habían hecho contra un avión soviético de transporte militar en el cielo de China.
Hace 67 años, el 29 de julio de 1953, un caza soviético MiG-17 derribó un avión de reconocimiento norteamericano RB-50G Superfortress en el espacio aéreo soviético.
Según muchos expertos fue la respuesta al ataque contra un avión de transporte militar Il-12 que había tenido lugar en el cielo sobre China dos días antes.
En verano de 1953 terminó la Guerra de Corea. Ya no había operaciones de combate, pero todavía se producían enfrentamientos, incluso en el cielo. El esperado acuerdo del cese de fuego se firmó entre las partes el 27 de julio.
A pesar de ello, ese mismo día EEUU decidió realizar una aventurada operación que podría haber puesto en jaque toda la región. Durante el vuelo de Port Arthur a Vladivostok, un avión de transporte militar soviético Il-12 fue derribado, tras ser atacado por cuatro aviones de combate norteamericanos.
El historiador Alexánder Orlov escribe en el artículo Reconocimiento aéreo de EE UU sobre el territorio de la URSS en 1950-1955, “el avión soviético siguió la ruta establecida, que pasaba sobre el territorio de China a una distancia considerable, hasta 300 km, de la frontera chino-coreana”.
En otras palabras, no fue un encuentro accidental en el cielo sobre Corea; además, durante la guerra se prohibió oficialmente a los pilotos estadounidenses entrar en el espacio aéreo chino.
Según una versión, los norteamericanos creían que había militares soviéticos a bordo y por eso fueron a derribar el avión. Murieron 21 personas, la mayoría médicos de aviación militar - Leer màs