(elcomunista.net) - El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, fue a la Cumbre de Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) a cumplir el mandado del imperio norteamericano de difamar a Nicaragua, Venezuela y Cuba;
fue a repetir las mentiras que se difunden descaradamente sobre estos tres dignos países, pero que son la realidad diaria en Colombia, por poner un ejemplo significativo.
El régimen narcoparamilitar uribista de Iván Duque se lanzó a aplastar el pueblo colombiano, porque éste se atrevió a salir a la calle a marchar contra el Gobierno más impopular y corrupto de la historia reciente de la nación sudamericana.
Sobre lo que ocurre en Colombia Lacalle Pou no dijo nada, sino que dedicó a despotricar de la pequeña, pero digna isla caribeña, a la que los amos imperiales de Lacalle Pou no han podido doblegar ni con chismes, ni con falsas noticias, ni con el criminal bloqueo económico.
A Cuba no la han podido arrodillar ante la bota imperial.
Lacalle Pou debe solicitar el fin del asesino bloqueo contra Cuba; eso es lo que debe solicitar el mandamás uruguayo, si de verdad desea el bienestar para los cubanos.
La mayoría de los problemas que padecen los cubanos es producto del bloqueo criminal impuesto por Estados Unidos.
Pero Lacalle Pou no lo hace, porque sus amos del Norte no se lo van a permitir. Además, un neoliberal como él no sabe, sino repetir la receta neoliberal, cuya esencia es saquear y privatizar, privar de la vida a los pueblos.
Cuba ha desarrollado la vacuna Abdala con una eficacia altísima. Pero Luis Lacalle Pou no fue a hablar de eso a la VI Cumbre de la CELAC; tampoco habló de que ningún niño cubano duerme en la calle, a ningún cubano se le niega un techo, mientras el neoliberalismo construye cinturones de miseria y condena a millones de niños a acostarse por las noches sin llevarse un pedazo de pan a su boca.
Los estándares de educación en Cuba son altísimos. Cuba erradicó el analfabetismo, gracias a la Revolución; gracias a que el Che ideó y practicó el modelo de medicina familiar en Cuba, éste ha sido un ejemplo para el mundo.
Y así sucesivamente la Mayor de las Antillas es un ejemplo en muchos aspectos para el mundo; el mundo tiene que aprender de Cuba, pero el imperio, sus lacayos y los Lacalle quieren ocultar la verdad con montañas de mentiras - Ver texto