(Sputnik / elcomunista.net) - Una jugada a varias bandas, con diferentes y enfrentados protagonistas, puede sacar al Líbano de la crisis agónica que está sufriendo y a Siria del aislamiento provocado por las sanciones occidentales.
Por Luis Rivas* - El «país de los cedros» ha agotado todos los adjetivos para referirse a las condiciones de vida de sus ciudadanos.
Con un 80 por ciento de los habitantes en la pobreza, según cifras de la ONU, Líbano hace frente a una penuria de combustible y de corriente eléctrica que afecta tanto a los ciudadanos particulares como a hospitales y otros centros públicos de los que dependen la vida de enfermos o de recién nacidos.
Ante ese panorama, el partido chií libanés Hezbolá, aliado local de Teherán, pidió a Irán el envío de fuel, indispensable para producir la electricidad.
Dos buques iraníes arribaron al puerto sirio de Banas y el combustible fue transportado hacia el Líbano en camiones; se espera un tercer cargamento en estos días.
ACERCAMIENTO ABDALÁ II-BASHAR ASAD - El esfuerzo humanitario es también una ofensiva de influencia política en un país donde las diferentes comunidades religiosas responden también al favor de protagonistas externos.
Así se interpreta también la iniciativa del rey jordano, Abdalá II, que tiene como fin suministrar gas procedente de Egipto y el excedente de electricidad de Jordania al Líbano, vía Siria. La operación egipcio-jordana serviría de cabeza de puente para el acercamiento de los países árabes a Damasco.
También provocó la primera conversación oficial directa –vía telefónica– entre el monarca jordano y el presidente sirio, Bashar Asad, en diez años.
Ese acercamiento entre estos dos países, con relaciones congeladas desde la imposición de las sanciones occidentales a Damasco en 2011, fue seguido de otros pasos, como los encuentros bilaterales entre los responsables de exteriores de Siria y Jordania en Nueva York, la visita del ministro sirio de la Defensa a Amán y, por supuesto, la apertura del paso fronterizo de Jaber-Naseeb.
Beirut recurriría al Banco Mundial para financiar el proyecto. Pero el plan no es viable si tanto el gas como la electricidad no transitan por territorio sirio. Si todo se desarrollase positivamente, las infraestructuras necesarias, castigadas por los combates en Siria (pilones de electricidad y el gasoducto que atraviesa la región) deberían ser renovadas - Leer màs